La introducción de la inteligencia artificial (IA) en la vida y el trabajo ha cambiado la forma en que las personas interactúan dentro sus sociedades. Una situación que no deja de plantear preguntas importantes sobre la expresión y la protección de los derechos humanos, las responsabilidades y repercusiones negativas, o la filosofía y orientación de su desarrollo. Por todo ello, son muchas voces las que apuntan a la necesidad de avanzar en la formación de ciudadanos y ciudadanas educados en Inteligencia Artificial.

Esta urgencia de crear un consenso internacional sobre cómo dotar a los niños y niñas de las competencias necesarias para comprender las posibilidades, pero también los dilemas éticos relacionados con esta nueva tecnología, choca con la falta de conocimiento de los gobiernos, las escuelas y los docentes que han de asumir el desarrollo e implementación de dicha tarea.

En respuesta a esta brecha de conocimiento, la UNESCO lanzó un proyecto en 2021 para desarrollar un marco de referencia sobre el plan de estudios de IA para los grados K-12, que incluía una encuesta global sobre los planes de estudio de IA respaldados por los gobiernos. Hace unos días este trabajo se materializó en el primer informe sobre el estado global de los currículos IA K-12: “K-12 AI curricula: a mapping of government-endorsed AI curricula“

Este informe contribuye al desarrollo de herramientas y marcos de apoyo efectivos para facilitar el desarrollo de competencias de IA en línea con la recomendación sobre la ética de la inteligencia artificial, adoptada por la Conferencia General de la UNESCO en noviembre de 2021. Se insta a los gobiernos a brindar y garantizar oportunidades para que todos sus ciudadanos y ciudadanas puedan incorporar en su currículum saberes de inteligencia artificial con una buena secuencia y unos resultados de aprendizaje alineados con los objetivos de la política nacional y las normas internacionales de derechos humanos y éticos. Se les anima además, a aplicar un enfoque humanista en la implementación de planes y programas, y a prestar suficiente atención a la construcción de la creatividad de los estudiantes en IA y la comprensión de la ética a través de un compromiso profundo con los algoritmos y datos que hay detrás de las herramientas.

Todo ello se plasma en nueve hallazgos clave y trece recomendaciones relacionadas con cuatro etapas principales del plan de estudios: desarrollo y aprobación, integración y gestión, contenido y resultados de aprendizaje e implementación.

Puede acceder el informe completo a través del siguiente enlace: acceso al recurso